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Revisar la calidad, procedencia de las proteínas, beneficios específicos y por supuesto contar con el asesoramiento veterinario, son factores clave. Incluir los nutrientes necesarios en la alimentación de los animales de compañía garantiza una alta calidad de vida.
Actualmente existen una gran variedad de alimentos en el mercado dirigidos a los animales de compañía que prometen reforzar su bienestar y salud. Sin embargo, es importante prestar atención a su procedencia, calidad, ingredientes, proteínas y vitaminas que estos deben contener para garantizar una correcta nutrición que contribuya a mantener una vida sana y fuerte para las mascotas.
“Según cifras recolectadas por distintas ONG a nivel nacional, la adopción creció aproximadamente un 200%. Estas estimaciones reflejan la llegada de un nuevo miembro al hogar y por ende responsabilidades que deben acompañar esta tenencia, incluyendo su nutrición. En este aspecto es importante tener en cuenta su historicidad, edad y temperamento. No es lo mismo que sea un cachorro o un adulto, ni si fue encontrado en situación de calle o viene de un criadero. Tampoco si se trata de un cachorro pequeño o gigante, todos tienen necesidades nutricionales diferentes” explicó Melisa Gonzalez Trajtman, Gerente de Marketing en Vitalcan Argentina.
En todos los casos, hay ciertas pautas que se deben considerar para alimentar correctamente a los animales de compañía:
Calorías: un cachorro necesita más calorías y más grasa que un animal adulto ya que está en pleno crecimiento pero en el caso del perro, hay que considerar también su talla o tamaño.
Tipos de proteínas: se debe tener en cuenta no sólo la cantidad de proteínas que tiene el alimento sino también la calidad de las mismas. Esto figura en los ingredientes que están en el pack. La proteína animal tiene la mejor calidad y es importante tanto que esté mencionada como su orden de aparición, ya que como regla, todos los ingredientes se listan de mayor a menor concentración en el producto a consumir.
Tiempo de adaptación: llegar a un nuevo hogar representa para las mascotas una serie de cambios en el entorno y en la cotidianeidad, que causan inevitablemente situaciones de estrés. Por eso muchas veces en esta etapa de adaptación si la mascota no tiene un problema nutricional serio que justifique el cambio urgente, se trata de esperar unos días para hacerlo.
Transición de alimentos: es ideal que el cambio sea gradual. Comenzar sumando apenas un 25% del nuevo alimento a la ración tradicional por dos días, posteriormente 50% y por último dos o tres días con un mayor porcentaje del alimento nuevo. Esta transición debe durar aproximadamente entre siete y diez días para que se adapte principalmente a su sistema digestivo.
Opinión veterinaria: Apenas llega al hogar el nuevo miembro de la familia, se debe llevar al veterinario para evaluar su estado sanitario. Será el profesional el indicado de asesorar sobre el cambio de alimentación, según las características del animal.
“Nos parece indispensable que los consumidores conozcan en detalle los nutrientes que se le están proveyendo al animal en su alimento, desde proteínas, grasas, vitaminas y minerales. Estos, acompañados por un correcto asesoramiento de especialistas, adaptado a las necesidades y condiciones de cada mascota, logrará proveer un nivel de calidad superior para que perros y gatos alcancen una vida a su máxima plenitud física y mental. ” finalizan desde Vitalcan, empresa pionera en Argentina en declarar el porcentaje de proteína de origen animal que tiene cada producto en sus packs.
